(Por error, este texto no se publicó cuando debía. Su posición es entre Palanganato y Palabras que yo todavía no sé. Primero pedos y luego loros. Mis disculpas.)
Tal vez huela mal, pero os aseguro que hay toda una mitología de los pedos de padre. Son parte de vuestra infancia, si la tuvisteis, los huérfanos van a tener que tirar de fe. En internet te puedes encontrar ventosidades paternas en cualquier tipo de coyuntura. Lista uno. Ascensores, reuniones familiares, bajo las sábanas, pujos ladradores, mordedores, apuestas, bromas, monólogos, cuñados, concursos. A Bandit Heeler se le caen. No lo puede evitar. Sus hijas lo llevaron a juicio. Qué personaje. Las princesas también se tiran pedos, Ilan Brenman e Ionit Zilberman, 32 páginas a todo color, Algar Editorial, 2011, tapa dura, tropecientas ediciones. Joder, hay artículos medioambientales (Los pedos de padre contaminan más que los pedos de vaca), artículos de El Mundo Today (Papá presenta su colección de pedos Otoño/Invierno), artículos gastroenterológicos (Intervención del cromosoma Y en procesos de flatulencia discontinua. Tres hipótesis). Mi hija, mi propia hija, inventó un juego: huele a pedo… de culo… de una persona… cuyo nombre empieza por erre, usa gafas, está medio calvo, escribe cosas como esta y ama los platos de cuchara. Y yo, claro, tenía entonces que adivinarme y fingir un gran enfado. Los hijos te devuelven hecho añicos al niño que fuiste. Ahora hay más canciones de flatulenciaso que antes. En los salvajes ochenta solo teníamos Enrique y Ana. Pedo de papi puf, puf, puf, puf, puf. La familia pedo levanten el trasero listos fuego. Etc. Etc. Lista dos. Sin duda hay más cuentos de hados fétidos, más camisetas graciosas, récord guiness multitudinarios, pedos íntimos, paternidades hediondas, chistes van un americano, un francés y un español, entonces para qué pregunta, un hombre y una mujer están en la cama y. Los pedos de papá Perrault fueron siempre memorables. Una arquitectónica escatología intestinal. Con olor de mil demonios. Ni los ogros. Alguna vez le reprendieron D’Aulnoy y Guillermo Carnero, tan exquisitos ambos, por ser tan cerdo, pero el viejo ladeó el cuerpo y soltó siete gases como siete leguas y los demás huyeron en tropel. Explícale tú al muy sinvergüenza, lista tres, que hoy en día nos sobran los juegos de mesa de tirarse pedos, los doritos sabor pedo, el premio nacional de pedos, grado y máster en pedos, pedos que imitan pedos, pedos que peroran sobre pedos, metapedos, multipedos, pedos rotos, la venganza de don Pedo, pedófilos, pedonautas, pedorretas, pedorros, pedillos a la mar, pedos adulterados, pedos de libro, de manual, de cajón, pedigüeños, pedúnculos de cultivo ecológico y corazones en pedazos. Agh, los cuescos de padre, fragancia del hogar de la niñez.