Deglutores de hachís añaden su compota al café para el desayuno. Trajes blanco hueso como si el viejo y asqueroso del Tío Lee siguiera vivo: demasiada gente maldiciendo a Kurt Cobain como para que no decida volarse la cara de un disparo; le debo un cáncer de pulmón a Kurt. Ese tipo de cosas. Soy un genio, el escritor predilecto de tu escritor predilecto: me han visitado en delirios y ascensiones. Me siguen llamando pero hay miedo [o todo lo contrario]. Deglutores de hachís vistiendo, de la color en blanco hueso, rompen el continuum [sea lo que sea eso] y lanzan un motón de palabras de perdón. La redención es un trabajo arduo y colectivo, no lo olvidéis.
Os lo dije.
Os lo dije.
Lo dije.
Dije.
Que no os paren, el ejército de EEUU compra armas embrujadas a la buena gente de Haití. Ese tipo de cosas. Las balas ahora llevan maldiciones Z no uranio empobrecido. El chiste está en quiénes han abierto tantas puertas para que ahora TODO nos cuadre. No tengas fe en la ciencia, no seas idiota, la fe no es para la ciencia sino para maldecir colectivamente ese tipo de usos de la magia: balas con enfermedades culturales adheridas. Os vais a cagar cuando, aullando a la luna, ésta nos guiñe el mare crisium.
OS LO DIJE.
¿Qué vas a hacer cuándo levites hasta el techo de la habitación y ella te mire con su rostro mitocondrial?
Os quiero. Pero os lo dije.
2 comentarios:
Plas, plas, plas. Dice Blake que espabiles, que la magia no se hace sola.
hahahahahaha Dile a Blake que se calle, que estamos en buenas manos y que gracias por la aportación, pero que ya nos encargamos los vivos del mundo vivo.
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